El dolor de garganta, ¿qué, por qué y por qué a mi?
Maldito el día que uno se despierta y se da cuenta que además de ganas de seguir durmiendo se levanta también con un dolor de garganta super molesto -también llamada farangitis– Para mi, el sufrir de los dolores de garganta es la versión física más parecida a sufrir emocionalmente porque el amor de tu vida te haya abandonado… ósea, es la sensación más incómoda que uno puede tener en el cuerpo humano; esta claro que antes dolerá más una amputación de pierna sin anestesia -lógico…- pero sentir que tienes la garganta hinchada, que te molesta, que te pica, una rojez increíble, y que encima te duele mucho por tragar un poco de saliva, pues… que queréis que os diga, creo que padecer de dolores de garganta podría perfectamente entrar en el Top 3 de dolores y molestias «médicas» sufribles por alguien.
Qué dolor… cuando el tragar un poco de saliva se hace ya insufrible, no quiero ni acordarme de lo que es comer algo, masticar y tragarlo por tu esófago… parece que estás intentado comerte una pelota de tenis… De todas formas… ahora que pienso… ¿para que quiere uno comer mientras sufre de dolores de garganta? y es que lo más seguro es que además de padecer de faringitis que te provoca tener tu garganta inflamada también vayas a padecer de un resfriado extremo, constipado de locura, o catarro arrollador.. -y por lo tanto- no poder saborear la comida, ni tan si quiera olerla, es más, dependiendo del nivel de infección de garganta que tengas, junto al resfriado, aunque te taparan los ojos y te llevasen a una asquerosa planta depuradora donde te dijeran «estás en una perfumería francesa, al lado del stand de Chanel Nº5, te lo crees verdad?» pues si, probablemente te lo creerías…
Y es que como si de Reservoir Dogs de Quentin Tarantino se tratará, el dolor de garganta suele siempre venir acompañado del Sr. Conspitado, Sr. Catarro, Sr. Resfriado, y hasta incluso a veces del temible Sr. Fiebre. Por favor…. si sufrir dolores de garganta ya es una pesadilla, que encima no nos regalen un «extra de sufrimiento»… como si fuera fácil sobrevivir a la «tan sola» farangitis (…)
¿Pero que provoca ese dolor de garganta?
Bueno, eso es muy relativo, el dolor de garganta puede ser provocado debido a un virus o a una bacteria. O directamente también por haber salido el anterior fin de semana a un bar con la camisa medio abierta tipo sex-simbol, actuando como si fuera verano cuando estábamos en pleno invierno, sí, muy bien, uno quizás ligue mucho esa noche, pero al día siguiente -o al otro- con quien se acostará en la cama será con la Srta. Farangitis (en caso de ellos) o con el Señor Dolor de Garganta (en el caso de ellas)
Y es que para curar el dolor de garganta vamos a tener mucha paciencia. No existen milagros y como dice aquella expresión… los milagros a lurdes! Lo primero que vamos a tener que hacer es acudir a nuestro médico y que nos miré bien la garganta con una de esas lupas con luz y aquellos palos de madera (depresores) que usaban cuando eramos pequeños y nos decían «abre la boca, aaaaaaaaaaaaa» El doctor o doctora tiene que decirnos el tipo de infección de garganta que tenemos; si es provocada por virus (viral) o bacterias (bacterial).
Pues no tiene mucho que ver no, tiene MUCHÍSIMO. La infección a causa de virus puede ser tratada con fármacos y medicamentos ‘normales’ contra el dolor de garganta, pero las causadas por bacterias solo podrán curarse con antibioticos, un tipo de medicamento bastante fuerte y que solo deberemos usar si nuestro médico nos da la receta…
¡Estad atentos sobre futuros artículos sobre remedios y alivios para el dolor de la garganta!